En un estudio realizado durante 10 años en Estados Unidos, los consumidores habituales de café fueron menos propensos a morir por distintas causas, como la enfermedad cardíaca y la diabetes, que los que no bebieron la infusión.

De hecho, a mayor consumo de café, menor riesgo de morir. Esto se repitió con el café descafeinado.

«El café contiene numerosas sustancias biológicamente activas, como los ácidos fenólicos, el potasio y la cafeína», dijo la autora principal, doctora Erikka Loftfield, del Instituto Nacional del Cáncer, en Maryland.

Su equipo utilizó los datos de un estudio previo sobre 90.317 adultos sin cáncer ni antecedentes cardiovasculares, controlados durante el período 1998-2009: 8.700 habían fallecido para el 2009.

Tras considerar otros factores, como el tabaquismo, los autores hallaron que el consumo de café reducía las posibilidades de morir durante el estudio. Ese riesgo caía más en los que bebían cuatro o cinco tazas diarias de café. Lo mismo sucedió en los consumidores de café descafeinado, según publica el equipo en American Journal of Epidemiology.

La reducción del riesgo de muerte alcanzó a la enfermedad cardíaca, las enfermedades respiratorias crónicas, la diabetes, la neumonía, la gripe y el suicidio, pero no el cáncer.

«Aunque beber café también está inversamente asociado con la incidencia de ciertos cánceres, como el hepático, en estudios epidemiológicos, no hallamos una relación entre el café y la mortalidad por cáncer», indicó Loftfield.

«Eso sería porque el café influye en el riesgo de algunos cánceres y no de otros», agregó.

Los consumidores de dos o tres tazas de café por día tenían un 18 por ciento menos posibilidades de morir durante el seguimiento que los que no bebían café. La autora precisó que ingerir hasta cinco tazas diarias de café o 400 mg/día de cafeína no estuvo asociado con ningún riesgo en el largo plazo.

El consumo moderado de café (hasta 200 mg/día) es aún más seguro para las embarazadas, según declaró el Colegio Estadounidense de Obstetricia y Ginecología.

«Hay cada vez más estudios de muy alta calidad que demuestran que las personas que consumen más café tienden a tener mejores resultados en salud», dijo el doctor Marc J. Gunter, del Imperial College de Londres y que no participó en el estudio. «Beber café está correlacionado con otras conductas saludables», agregó.